Ayuno a la Indiferencia
Lo que aparenta hoy ser ruinas
Lleva su propia belleza en sus virutas
La anciana cáscara de la tierra con todas sus arrugas
No solo existe sino triumfa
Fieles arbustos resecos donan su sombra espléndida
Cerezos florecen entre desechos y descuidos
Olivos abstienen con paciencia – su propia penitencia
Un rito que comienza y termina
Cuando el agua bendita del cielo cae
A bautizar las huertas
Se perdonan las cicatrices que marcan el tiempo
Transcurrido e indiferente
Se une el principio de la vida con su final
Se olvida nuestra caducidad
Y fertiliza aunque sea una sencilla flor silvestre
De un espíritu aparentemente resistente
Qué maravillas conciben con tantos desechos
Los que ven con bondad sobre el barro seco
Los que iluminan y purifican sin egoísmo
Los que renuevan su misión en el desierto
Destruyen los errores anteriores
Dan la bienvenida al sol de primavera
Y a la luna llena
Para prestar atención — sin juicio previo
por María Elena (Feb, 2016)
Bonitos versos llenos de sentimiento María Elena,
Un abrazo